Hacia un modelo híbrido de trabajo en las empresas
Teletrabajo, coworking, workout, flexwork, coliving, digital nomads, burnout, hibridación, espacios flexibles, homeoffice, bleisure, Total Revenue Management… La pandemia ha llenado las noticias de titulares plagados de anglicismos dándonos datos, ideas y orientaciones de que algo está pasando en el mundo del trabajo.
De la noche a la mañana, en marzo de 2020, pasamos de un modelo básicamente presencial (que nuca nos habíamos cuestionado seriamente), a un modelo completamente remoto y, además, en casa. Sin tiempo para pensarlo, mejor o peor, empresas y profesionales acondicionaron sus métodos y espacios para poder continuar produciendo.
El paso de los meses comenzó a revelar cosas, muchas cosas. Algunas muy buenas. Otras, no tanto. Y el decaimiento de la COVID, Dios quiera que no vuelva con la misma virulencia desencadenada por nuevas cepas, nos devuelve a una suerte de normalidad a la que llegamos cambiados. Entre otras muchas cosas, nos preguntamos si el trabajo puramente presencial es el mejor modelo.
Y parece que la sensación es que no, que no lo es. Lo malo de las sensaciones es que pueden ser muy engañosas o tendenciosas e interesadas. Entonces, ¿Ahora qué? ¿Cuál debe ser el modelo? Tal vez sea una buena idea leer los datos y las encuestas.
Por ejemplo, el pasado mes de septiembre Savills Aguirre Newman publicaba los resultados de una encuesta hecha sobre un universo de 100.000 personas. Y muestran algunos datos muy interesantes:
- El 87% de los empleados en Europa cree que la oficina es esencial,
- Un 12 % dice que trabajaría en espacios flex o coworking, frente a solo un 3 % en 2019.
- Un 27% de los encuestados respondió que utilizaría una oficina cercana a su casa además de la propia si tuviera la opción.
Y déjenme dar dos datos más. Una noticia de Bloomberg, señalaba que un 39% de los trabajadores considerarían renunciar si se obliga al trabajo presencial. Y sendos informes de PwC y KPMG indican que solo el 19% de las empresas volverán al modelo puramente presencial, y que el 38% de los CEO españoles asumen un modelo con más de 2 días de trabajo remoto.
Los datos parecen indicar que el futuro apunta que el puesto de trabajo estará ligado al profesional y no al revés. Algunas veces iremos a las oficinas y otras nos quedaremos en casa trabajando. Pero está claro que esas no van a ser las únicas opciones. Los espacios flexibles tendrán cada vez mayor peso y presencia. JLL se aventura a pronosticar que en 2030 el 30% de los puestos serán de este tipo.
El mundo del Coworking, o del alquiler de espacios profesionales flexibles, no es nada nuevo. De hecho, nace en San Francisco a principios de siglo y, pese a haber tenido un crecimiento importante, no ha adquirido una dimensión global hasta el advenimiento de la COVID-19.
Veamos que pasa en España. Estudios recientes[1] apuntan a que el volumen de potenciales teletrabajadores es muy superior a la oferta de espacios de trabajo flexibles en alquiler. Según el BdE[2], más de 6M de profesionales españoles podrían hacerlo y esta cifra es 3,7 veces mayor que el número de profesionales que lo hacían en 2019.
Además, a la hora de dimensionar el mercado y las tendencias del mismo, es importante señalar que, pese a observarse un incremento en el trabajo en remoto, España aún se sitúa muy por debajo de sus homólogos europeos.
Estos datos indican una clara tendencia creciente del número de profesionales que tendrá la opción de teletrabajar. Como decíamos, parte de ese ingente volumen de jornadas se producirán como homeoffice, pero otra parte significativa buscará, ya lo está haciendo, espacios mejor acondicionados que el domicilio.
Poder desempeñar la actividad profesional en espacios flexibles de trabajo aporta muchos beneficios tanto a las empresas como a sus trabajadores:
- Flexibilidad, a la hora de dimensionar los espacios propios y de elegir el espacio óptimo para cada ocasión.
- Ahorro y control de costes, por la reducción de los espacios necesarios y el conocimiento exacto de los costes mensuales/anuales
- Sostenibilidad y reducción de la huella ecológica. Mejora en la sostenibilidad por la reducción del número y longitud de los desplazamientos al trabajar en espacios de cercanía.
- Socialización, Team Engagement y Networking. Frente al Homeoffice, el trabajo en espacios flex permite la relación y el intercambio de conocimientos y experiencias con otros.
- Captación y retención del talento. La posibilidad de captar talento en cualquier parte del mundo y de retenerlo es mucho más asequible y eficaz que las burbujas salariales.
- Satisfacción del empleado. Los estudios muestran que el 88% de los trabajadores se consideran más felices con estos modelos. Y más felices quiere decir más productivos.
Sin embargo, la implantación efectiva de este modelo necesita de Plataformas o Brokers del mercado de alquiler de espacios que sean capaces de ofrecer una herramienta que permita a los profesionales trabajar en esos espacios. A día de hoy, hay cientos de páginas que ofrecen sus propios espacios de trabajo en alquiler en diferentes modalidades: flex, fix, despacho, sala de reuniones, por horas, meses o días.
Pero es necesario un actor que ofrezca al mercado de autónomos, pymes y corporaciones una herramienta que sirva para gestionar eficientemente el día a día de sus profesionales y les permita localizar el espacio idóneo en el momento en el que lo van a necesitar.
Eekox puede ser esa plataforma, siendo la que ofrece un modelo más completo y ambicioso, fundamentalmente orientado a las empresas. Si bien es cierto que los profesionales autónomos y micro-pymes ya abrazaron hace tiempo el modelo, el reto lo tienen ahora las compañías de tamaño medio y grande.
Éstas últimas necesitan implantar los mecanismos que permitan ofrecer a sus empleados (o a una parte de ellos) la posibilidad de trabajar en el espacio que mejor se ajuste a sus necesidades. Bien por cercanía, bien por condiciones requeridas. Ello redundará, como decíamos, en empleados más eficientes y satisfechos, con mayor sentimiento de pertenencia. Y también en empresas más verdes, más sostenibles y más competitivas.
Eekox ofrece un modelo personalizado de abonos en el que los empleados pueden seleccionar el lugar y tipo del espacio que van a utilizar, fijando la compañía el número máximo de jornadas que pueden consumirse. Este modelo proporciona a las empresas no solamente la flexibilidad de poder utilizar centenares de opciones, tanto en el lugar habitual como durante los viajes, sino que le permite beneficiarse de precios muy competitivos por el hecho de gestionar un volumen significativo de jornadas.
Es el momento de que las empresas y corporaciones aborden de forma decidida este cambio en el paradigma del trabajo que, en realidad es un cambio de paradigma en nuestro modo de vida.
[1] Estudio teletrabajo España 2021 – Randstad Research
[2] Banco de España (2020), “El teletrabajo en España”. Artículos Analíticos 2/2020. Brindusa Anghel, Marianela Cozzolino y Aitor Lacuesta
Redacción Eekox